¡Chapeau! Señor Alcalde (Diario Alerta - 20-04-2003)
Santander: el paseo marítimo más miserable de
Europa, artículo publicado el pasado
verano, en el que exponía mi parecer por la ridícula “parcela” reservada a
los peatones y, eso que era un paseo marítimo...
Partí de Cantabria sintiéndome impotente para
luchar contra tanta barbaridad como viene cometiéndose en mi queridísima
Cantabria, decidí alejarme de ella y fijar mi residencia en Castilla...
Entre tanto me considero un exiliado de Cantabria, víctima de su (salvo
escasísimas excepciones) nefasta clase política, encabezada con toda
coherencia por el grisáceo señor Martínez Sieso.
En mi carta a Gonzalo Piñeiro le
aseguré que si se deshacía el disparate perpetrado en Puerto Chico, escribiría un nuevo artículo sobre el particular,
rectificando
el contenido del primero y desdiciéndome de todos los improperios que en aquella
ocasión me vi obligado a dedicarle, confieso que bien a pesar
mío... Bien, por fin alguien me proporciona la oportunidad de quitarme el
sombrero y de decir: ¡chapeau! O, en el equivalente
castellano de esta palabra francesa, heredada como casi todas del euskera: ¡olé!
Porque desde mi exilio segoviano, al pie de una
hija de Peña Labra, he podido saber por mi mujer, de vacaciones en Santander, que ha sido íntegramente levantada la
calzada que motivó mi tremenda invectiva contra el alcalde, pudiendo deducirse
de ello que ese espacio –como era inexcusable y de ley- va a ser consagrado
a los ciudadanos, prolongando así el extraordinario paseo con que el señor
Piñeiro regalase a Santander pocos años ha y que todos podemos disfrutar
hoy (yo desde la nostalgia...) en el antiguo Muelle de Albarado.
Que, por cierto, nada tiene que ver con ningún
personaje de este nombre sino con el que fuera uno de los más antiguos e
insignes nombres de la ciudad de Sant
Anders o de Albaranazia, recordado aún –entre otros- en la denominación
de dicho muelle y en la de la antigua aldea y hoy barrio de La
Alberizia. Así como en el islote de Marnía..., por
corrupción de Barnía y Albarnía (antiguo nombre de Escocia)...
es el precedente de Albaria > Iberia... ¡Nada
menos!...
Al señor Gonzalo Piñeiro, a quien por ser capaz
de rectificar, expreso públicamente mis disculpas, mi admiración y mi
simpatía.
Depurando responsabilidades (III) Yo acuso... (Diario Alerta - 13-04-2003)
No existe crimen que merezca un castigo mayor,
que el de la honestidad y la independencia intelectual. Decir la verdad y
proclamarla a los cuatro vientos, enmendando con razones a los
poderosos y sin que quede fuera de ese espectro de crítica del rey abajo, ninguno, es el mejor
camino para acabar convertido en un auténtico proscrito. Sé bien de lo que
hablo porque llevo algo así como treinta años plantándoles cara a quienes
nos gobiernan y diciéndoles, casi siempre, lo que nadie les había dicho
jamás. Ocioso es decir cuánto he
medrado debido a ello...
No estoy hablando de cantarle las cuarenta a uno u otro partido, sino a todos ellos
en su conjunto, por cuanto todos comparten las mismas carencias en lo que
yo considero absolutamente primordial para la buena marcha de una sociedad:
que quienes tienen la osadía (y a menudo la arrogancia) de proponerse para
gobernar a los demás, se hallen adornados de un altísimo nivel
intelectual...
Al referirme a los problemas verdaderamente
graves que afectan al país estoy pensando en la forma de afrontar con
inteligencia el contencioso basko. O
en la demencia de nuestro sistema educativo, edificado sobre unos pilares
–el cuerpo profesoral- integrado en un 70% como mínimo por individuos sin
vocación alguna y cuya única mira es la de trabajar lo menos posible,
ganando, naturalmente, lo más posible... Pienso también en el dislate que
supone mantener absolutamente ociosos a todos nuestros estudiantes durante
un período no inferior a cinco de los doce meses del año. Y ello sin
ofrecerles ninguna alternativa atractiva y sólida que les ocupe, entretenga
y estimule, impidiendo que acaben consumiento su tiempo y sus vidas delante
de un televisor, de un vaso de alcohol, de un porro, de una pista de
baile... o de la pantalla de un ordenador. Y no para estudiar o para
formarse a través de él, sino para perder lastimosamente el tiempo holgazaneando en la red...
O la dilapidación de los recursos del Estado y
entre todos esos miles de millones, ni una sola peseta para
financiar programas que buceen en las profundidades de nuestro
brillantísimo y único pasado histórico, mostrándoselo a todos los Españoles
de una forma amena y atractiva que por una parte contribuiría a elevar el
nivel cultural y, por otra, a cultivar nuestra conciencia de pertenecer a
una nación privilegiada a la que le cupo el incomparable honor de poblar,
colonizar y civilizar a todos los pueblos de la Tierra.
¡Cuántos miles de películas y documentales
podrían producirse reconstruyendo la fascinante saga de nuestro pasado
histórico, para educación de propios y para asombro de extraños! Y en lugar
de eso ¡nada!. Ni siquiera un sencillo reportaje como el que en
vano vengo demandando de la televisión estatal, para que se haga eco de las
tesis de los investigadores europeos y americanos que al fin han empezado a
admitir lo que desde hace mucho tiempo constituía una evidencia
irrefragable: que la Humanidad racional se gestó a orillas del Cantábrico y que
Europa, Asia... ¡y hasta la propia América! se gestaron en el Norte de
España. Lo que constituye, dicho en pocas palabras, la
noticias más importante que se ha producido en nuestro páis desde que
existe como tal, con ventaja incluso sobre el propio redescubrimiento de América...
Justamente, la única vía que puede conducir a la
pacificación de Euskadi es aquella que pasa por el reconocimiento de todos
sus méritos y glorias históricas, compartidas todas ellas con las regiones
vecinas de Cantabria, Asturias, Castilla y León y Nabarra. Ofenden
a la inteligencia quienes creen que la manera de resolver un problema es
silenciándolo...
La guerra del castellano (X) La clave está en la
Toponimia (Diario Alerta - 06-04-2003)
¿En qué lengua hablaban los Castellanos de la Alta Edad Media –por lo menos desde
comienzos del siglo VII en que
existen documentos que permiten acreditarlo-, cuando se nos dice, en el
contexto de escrituras casi íntegramente redactadas en
latín, que sus nombres geográficos eran, todos ellos, neta y rematadamente
castellanos?... conclusión, el romance, existía ya desde hacía
numerosos siglos.
Cualquiera que haya afrontado en profundidad el
estudio de los nombres geográficos, sabe bien hasta qué punto se muestran
reacios, resistentes y reticentes a los cambios y mudanzas. Nada hay más
difícil que consagrar un nuevo topónimo... y, conseguir que se
olviden del nombre con el que tradicionalmente se ha conocido a ese lugar...
por ejemplo, el nombre de la población segoviana de La Granja, mudado
oficial, artificialmente y por real decreto
en San Ildefonso...
Ante cualquier nombre geográfico deberíamos
mostrar el mismo respeto que ante cualquier otra reliquia de nuestro más
remoto pasado. Porque, en efecto, la mayoría de ellos tienen una antigüedad
escalofriante, con independencia de las corrupciones y mudanzas que puedan
haber sufrido. Otro ejemplo de lo cual nos lo ofrece la propia denominación
de esta comunidad: Cantabria. Nombre que ha llegado
hasta nosotros sensiblemente degradado y deformado, pero que permanece
fidelísimo a la primitiva denominación de la que fuera la región más
importante y extensa del Norte de España. Por espacio de
bastantes siglos, el nombre de Cantabria se vio prácticamente
engullido por el olvido y, sin embargo, a la postre, ha vuelto nuevamente
por sus fueros. Como sucederá con el nombre de La Montaña que hoy
por razones políticas, ha caído en desgracia y que resucitará con fuerza
algún día...
El hecho de que en las escrituras altomedievales
nos encontremos con toponimia netamente romance ya
en siglos tan tempranos como la sexta, séptima, octava, novena y décima
centurias, supone la confirmación definitiva y concluyente
de que por lo menos desde varios siglos más atrás, la
población de la España septentrional tenía al romance como único
vehículo de expresión. Por supuesto, en todas y cada una de sus
variantes dialectales, germen de lo que más tarde acabarían siendo lenguas
propiamente dichas, más o menos diferenciadas (catalán, castellano, gallego, bable, montañés, fabla...)...
Si los nombres con los que se designaba a los
lugares eran romances, ello es indicio inequívoco de que la lengua común
de la población del Norte de España hablaba en romance...
las escrituras eran documentos jurídicos y su misión
fundamental era la de dar fe de los acuerdos
correspondientes. Traducir los topónimos al latín equivalía, lisa y
llanamente, a dejar sin valor alguno aquellos documentos. Porque ¿quíen iba
a reconocer los límites de una propiedad rústica o urbana que se había
adquirido, vendido o donado si sus nombres, al ser traducidos, habían
dejado de ser representativos y definitorios?...
La guerra del castellano (IX) Más claro..., el
agua (Diario Alerta - 30-03-2003)
Sería de idiotas pretender que los monjes de
todos los monasterios del Norte de
España se pusieron de acuerdo en adulterar todos los documentos que
pasaban por sus manos, cambiando su texto latino originario por otro
castellano o castellanizado, solamente
en una parte muy concreta de esas copias que, además, acostumbra a ser
siempre la misma.
Si todos
escriben en castellano un párrafo muy específico de esos documentos, no es
porque se equivocaran o pervirtieran la pureza de los originales latinos,
sino porque era costumbre inveterada, arrastrada seguramente desde el
inicio mismo de la presencia de Roma en España, la de escribir en lengua
castellana aquella parte de los documentos que nada tenía que ver con las
cuestiones estrictamente eclesiásticas y que afectaba a asuntos tan
cotidianos, ordinarios y pragmáticos como puedan serlo el hecho de que los
monjes poseyeran un determinado número de colchones, hábitos, vacas o
bueyes...
Esos
inapreciables documentos altomedievales lo que demuestran es que las
lenguas romances convivieron sin ningún tipo de conflictos con la lengua
latina, justamente porque sus ámbitos de uso e influencia eran
completamente distintos: aquéllas reservadas para el lenguaje común, para
la comunicación entre las gentes, y ésta circunscrita a los actos
eclesiásticos, jurídicos, legislativos o literarios de los que siempre se
mantuvo (o fue mantenido) distante el pueblo... se quedaban “a dos
velas”...
La situación más surrealista que seguramente se
haya dado en la historia de la Humanidad: Por espacio de alrededor de veinte siglos, los templos religiosos
cristianos se han visto repletos de fieles que asistían a los actos del
culto sin entender una palabra de lo que escuchaban y, lo que aún resulta
más ridículo, sin entender una palabra de lo que repetían, insisto, como
verdaderos papagayos...
Las adulteraciones en los documentos, en los
casos en que se producían, obedecían a cuestiones de intereses, de
prestigio, de dominio e influencia, de poder... Pero por lo mismo que nadie
perdería miserablemente el tiempo en nuestros días, reproduciendo
escrituras para salpicarlas de errores o para sustituir sus términos
correctos por otros que lo fueran menos, es impensable que ningún monje del
medievo incurriera en tamaña estupidez...
La guerra del castellano (VIII) Filólogos de
pacotilla (Diario Alerta - 23-03-2003)
Los filólogos
riojanos que han engendrado la aberración científica de la génesis emilianense de la lengua castellana, gustan de escudarse en el
pretexto de que muchos de los documentos en los que aparecen palabras en
castellano y que aventajan en varios siglos a las Glosas Emilianenses, han llegado hasta nosotros no en los
textos originales sino en copias que de éstos se hicieron en años o siglos
posteriores... (muchos sí han llegado hasta nosotros en su forma
original... e incluso hay copias que son hasta dos siglos más antiguas que
esos tan traídos y llevados ejercicios de traducción de latín de unos
monjes de San Millán de la Cogolla,
a los que se ha bautizado con el ridículo nombre de Glosas Emilianenses).
Quienes pretenden que la aparición de términos
castellanos en los documentos de los siglos VII al XI se debe a
que se trata de copias de documentos originales perdidos que fueron
transcritos más tarde con el lenguaje que entonces se utilizaba, el castellano
o romance, ofenden con semejante argumento al sentido común y
a la inteligencia y no hacen sino poner aún más en evidencia la magnitud
del fraude científico que han consumado...
El denominador común de la inmensa mayoría de
los documentos de los siglos VII
al XI de los que hasta la fecha
he tenido conocimiento, es el de aparecer redactados casi íntegramente en
latín. Y es que –cual si de una norma establecida se tratara- todos ellos
concuerdan en un punto fundamental que es, precisamente, el que los
acredita como auténticos: una parte de esos documentos –aquella en la que
se enumeran los bienes respectivos de cada monasterio o bien se describen
sus términos- aparece sistemáticamente escrita con voces castellanas
unidas entre sí a través de partículas latinas. Verbigracia per semdero
antiguo usque ad cobas de Sancio
mercatero et usque ad calzata
mercatera; et de ipsa calzata
usque ad molino antico ad illa serna de rio de Pero. ... hinc parte serra, bustare de Haeto rubio...
El copista escribe en latín con palabras castellanas.
Léase, da forma latina a la lengua castellana en la que los autores de
estos textos se expresaban. Y precisamente porque en esta parte de
los documentos se ocupan de asuntos muy concretos y prácticos, que nada
tenían que ver con el mundo del espíritu,
los monjes prescinden del latín y recurren a la lengua común: el romance...
Y es así como ya desde los primeros documentos monásticos que han llegado
hasta nosotros, nos encontramos con todo un rico surtido de palabras romances
que tienen como denominador común el de expresar conceptos absolutamente
ordinarios y prosaicos...
Depurando responsabilidades (II) El señor
presidente (Diario Alerta - 16-03-2003)
En el caso de Cantabria, la región más directamente afectada y beneficiada
por mis descubrimientos históricos, el balance de la actuación de su clase
política resulta extraordinariamente sencillo: sin excepción alguna, su comportamiento ha sido garrafal. Nadie
se salva por desgracia, de esta generalización. Aunque que es verdad que el
grado de responsabilidad de unos y de otros, no es el mismo...
En quien recae la mayor responsabilidad de que
las cosas hayan sucedido como han sucedido: el Presidente de Cantabria, señor Martínez Sieso. Un señor al que
me dirigía por escrito dos o tres días antes de someterme a una operación
de corazón, rogándole se interesase por la conservación de mi obra en el
supuesto de que yo no superase esa intervención quirúrgica, habiendo sido
su humanitaria respuesta, el más
despectivo de los silencios...
Por desgracia para él, superé aquella operación
y también los durísimos años que la siguieron, privado prácticamente de
todo lo más indispensable. Pero el señor Sieso volvío a pasar
del asunto, convenientemente asesorado por toda esa horda de historiadores cretinos que posee y
padece la comunidad de Cantabria
y que fueron los responsables de que ya en el año 1984, cuando el entonces vicepresidente del Gobierno regional
señor Ambrosio Calzada se mostró
favorable a mis tesis históricas y dispuesto a patrocinarlas, se viera
obligado a volverse atrás de su decisión ante la presión de todos los historiadores e
intelectuales de Cantabria, unidos y confabulados contra mí y contra mi
obra. Y digo contra mí y nó
solo contra mi obra, porque no satisfechos con boicotear ésta, propalaron
toda suerte de calumnias respecto a mí mismo... como que... mis tesis históricas suponían un ultraje
para Cantabria y perjudicaban gravemente su imagen dentro y fuera de España...
El señor Martínez
Sieso, Presidente de Cantabria, es y será siempre el principal
responsable de que esta comunidad se haya visto privada de toda la enorme
cantidad de beneficios –económicos, de imagen y de toda índole- que le
habría procurado el hecho de proponerse como cuna de Europa y de la
cultura gestada por este continente y que en el decurso de milenios ha
llegado a adquirir el carácter de universal... El señor Martínez Sieso, Presidente de
Cantabria, es el mayor responsable de que toda la nombradía universal de la
que hoy podría gozar esta provincia si se hubieran respaldado mis tesis y
mis investigaciones, sea monopolizada por la comunidad vecina de Euskadi que, con una inteligencia
que en Cantabria brilla por su ausencia, está sabiendo capitalizar en su
beneficio las conclusiones de todas las investigaciones genéticas que
postulan a su población como la más antigua del continente, amén de madre de todos los pueblos
europeos... Ancianidad que –lo
afirmo- comparten e incluso acrecientan aquellos residuos de población
de Cantabria en los que perviven
los genes de los Kántabros
–mujeres y niños, casi exclusivamente- que lograron zafarse a la guerra de
exterminio emprendida por el Imperio Romano contra este región...
La cuna cantábrica de Europa (III) El origen
cantábrico del pueblo Judío (Diario Alerta - 09-03-2003)
Los Judíos
y sus hermanos los Arabes son
pueblos cuyas raíces deben rastrearse en el Norte de España... siete años después de mi descubrimiento y,
edición de mis libros Iberia, cuna de la Humanidad y Cantabria,
cuna de la Humanidad, llegó a mis manos una fotocopia, que me
facilitó Luis Racionero, del
libro de un investigador lituano que, mas de medio siglo antes que yo,
había defendido la misma tesis... (mis propias tesis y reiteradas alusiones
a él le han vuelto a poner de actualidad)
En el mes de Marzo del año 2001, Cristóbal Serra escribe en Palma de
Mallorca el prólogo de la reedición del opúsculo Les origines ibériques du
peuple juif, publicado en Francia en el primer tercio del siglo XX
por el lituano Oscar Vladislav de
Lubicz Milosz...
A continuación reproduzco la mayor parte del
contenido de dicho prefacio,
escrito por Cristóbal Serra bajo el epígrafe de El círculo de la verdad:
A principios del siglo XX, gracias a
unos hombres curiosos que no temieron ir al fondo de las cosas, se
multiplicaron las preguntas desaconsejadas por la vieja dogmática. Y una de
ellas fue el origen del pueblo judío. Hoy, poseedores del legado visionario
del arqueológo y lingüista O.V.de
L.Milosz, la existencia de
una gran civilización prehistórica occidental es cosa generalmente admitida
por la mayoría de los prehistoriadores. Lo que despierta más reticencias es
el origen ibérico del pueblo judío...
Según mi
juicio, Milosz dejó escrito este
estudio luminosísimo que, por cierto, ha servido de faro a muchos
investigadores que no se confiesan sus discípulos y que, sin embargo, lo
son. Y aquí he de referirme a un
libro capital de nuestra bibliografía: “Cantabria, cuna de la Humanidad”.
Su autor, Jorge María Ribero,
además de una ímproba tarea de hallazgos toponímicos en los que la
toponimia se convierte en pitonisa, ha tenido la valentía de afirmar, una
vez más, que el origen del pueblo
judío está en la Península Ibérica. Con su libro monumental, da respaldo a
la tesis de Milosz. De aquí que para Ribero, los hebreos sean los eberos;
lo que le lleva a afirmar el origen común de ambas tradiciones: la hebrea y la eusquera. Dicho de otro modo, el pueblo judío es el que con mayor pureza ha conservado su
idiosincrasia ibérica.
El vasco, vestigio venerable de la
lengua ibérica, en frase de Pidal, es la antorcha que alumbra la gran
civilización prehistórica occidental y que permite descubrir los orígenes del castellano... Cuando se produce la dominación romana,
la inmensa mayoría de los poblados de Iberia, de las Galias y de la propia
Italia siguieron expresándose como lo venían haciendo desde tiempos
inmemoriales... Hay que decir, a todos los vientos, que
la maternidad del latín sobre el castellano constituye todo un fraude. La
verdad no es otra sino que el castellano constituye una lengua autóctona de
la Península Ibérica, emparentada con las lenguas vasca y griega, ambas
anteriores a la latina...
Sólo hacerle una corrección a Cristóbal Serra... mal puedo ser yo
discípulo de Milosz, cuando como Luis Racionero y otros muchos pueden
atestiguar, no supe de su existencia hasta el día 19 de Noviembre de 1991...
fecha en que impartió Racionero una conferencia sobre el mito de los romanos que había sido organizada por mí...
Así es la vida, mientras mis tesis históricas
eran tenidas por aberrantes, yo era un loco.
Ahora que empieza a saberse que eran ciertas, dejaré de ser un loco y dirán
que las he copiado. Sin embargo y
aunque sé de una persona que lleva años perdiendo el tiempo en esta
indagación, nadie encontrará jamás ningún libro o documento que, antes de que
yo lo hiciese en 1984, defienda que la Humanidad nación en la Península
Ibérica. Y no lo hallarán porque esto es algo jamás se había sabido...
La Noche de las Marzas o de ‘las baras’ (Diario Alerta - 02-03-2003)
Esta tradición es –con enorme diferencia- la más
antigua e importante de la Humanidad... Permitanme ustedes que les sorprenda
con algunas de las revelaciones que el estudio de la tradición marzera
me ha hecho...
¿Por qué reciben las varas este nombre,
tan obviamente emparentado con la radical euskérica bal-/bar- para
designar a los vegetales? Pues por la misma razón por la que el nombre del
mes de Marzo procede de Barza. Y antes de Baraza.
Nombre vegetal por antonomasia, como corresponde al mes en el que
la Naturaleza renace y vuelve por
sus fuero, cubriéndose de berde (verde) los campos y los
árboles. Hecho que ya se produce, en el Norte de España, en
el decurso del mes de Febrero. Y
por eso es Barandail el nombre euskérico del último mes del año, Hebrero
= Febrero, reconocido como el primero en las épocas en las que la
Civilización tenía su principal asiento en el litoral cantábrico
hibérico.
¿Por qué el nombre de las baras (varas)? Pues lisa y llanamente
porque constituían uno de los elementos claves del ritual barzero
o marcero, al ser algo así como una versión reducida del barzandrón
= marzandrón en torno al cual se desarrrollaba toda la ceremonia de
salutación del nuevo año: el árbol profusamente adornado e
iluminado que representaba el nacimiento de la vida en la Tierra en forma
de tal, en esas fechas de comienzos de la Prima-Bera... en las
que se produce la resurrección de
la Naturaleza (¡atención al porqué de la Pascua de Resurrección!)... O sea, que quienes arremeten contra
el Arbol de Navidad como algo espúreo y ajeno a las
tradiciones ibéricas, son unos auténticos botarates...
El Arbol de Navidad representa al Arbol
de la Vida que, supuestamente, había crecido en el centro mismo del
Paraíso Terrenal y del que se
habían desprendido todas las formas de vida, animal y vegetal, que desde
entonces han poblado nuestro planeta... El neocristianismo (inventado en la propia España y no en Roma o
en Palestina como yo sostuve en su día) se cargó el culto al árbol y lo
reemplazó por el culto al Niño Divino.
Que no es sino una versión humana del árbol al que siguen
rindiendo culto –sin ser conscientes de ello- los pueblos anglosajones...
¿Cómo eran los belenes o pesebres
que montaban nuestros antepasados hace mil, dos mil y hasta tres mil años,
por supuesto no en el mes de Diciembre sino por estas fechas? Pues eran
troncos huecos de árbol o trozos de
corcho dentro de los cuales introducían la figurita del Niño Dios, rodeados
de algunos animales que venían a representar a todos los seres del mundo
animal que, como los seres humanos, habíamos nacido del Arb0l de la Vida...
Por eso yo monto un Nacimiento en mi casa durante la moderna Navidad y apenas superada la fecha del 6 de Enero, retiro el pesebre
y lo sustituyo por un arbolito que representa a ese Arbol
de la Vida que constituye el eje fundamental -¡a ver si se enteran
ustedes, marzeros de Cantabria!- de la celebración de la Noche
de Marzas. Cantar las marzas sin tener un árbol al
lado o un marzandrón humano que lo represente, viene a ser como irse
de copas a una catedral...: ¡una gilipollez!.
Al fin y al cabo, la celebración de la Nochebuena
no es ni más ni menos que una extrapolación, al mes de Diciembre, de la Noche
de Marzas. Y de ahí el que en algunas poblaciones españolas se
canten las Marzas..., en Nochebuena... o como las Marzas
de Salmoral que se cantan en Nochevieja,
siendo el 1 de Enero conocida en esta localidad lleunesa como el Día del Niño...
Si a esto le añaden el contenido de otras Marzas,
también lleunesas, en las que se
dice, textualmente, que Jesucristo trajo las Marzas a esta
tierra, entonces ya está todo dicho y absolutamente claro. Y no me
refiero sólo al origen de las Marzas..., sino al propio origen –hibérico y
mitológico- del Cristianismo. Que ésta es la cuestión. Ahora
entenderán ustedes por qué porta un báculo
o cayado el Papa de
Roma, recordando a la vara o callanda que nuestros
ancestros portaban en la Noche de
Marzas... o de Calendas y en las que, por
razones que otro día les contaré, tuvieron su origen los calendarios...
La cuna cantábrica de Europa (II) Los pueblos
semitas (Diario Alerta - 23-02-2003)
Los genetistas europeos cuyos estudios a partir
del ADN vienen corroborando mis
tesis respecto a la identidad de origen de los Europeos, no descartan la posibilidad de que pueda haber
existido en el extremo oriental de Europa,
en el ámbito de la antigua Iberia
del Cáucaso, otro foco menor de
población originaria que se habría extendido por el Este de Europa y Oeste
de Asia, completando ese 75% u 80%
de ascendencia cantábrica que se
les reconoce a los Europeos.
Aunque algunos historiadores y filólogos... se obstinen
en negar la evidencia de la identidad de origen de las dos Iberias euroasiáticas –la occidental
o hispánica y la oriental o caucásica- lo cierto
es que tanto los testimonios de los historiadores clásicos como las
flagrantes afinidades toponímicas y lingüísticas, zanjan cualquier duda...
todas las evidencias proclaman, que fueron los pobladores de la Iberia europea los que, en el
decurso del último período glaciar, viajaron hasta esas tierras asiáticas a
las que, por hallarse entre dos mares como las de su solar de procedencia,
bautizaron con el nombre de Iberia
que ha perdurado hasta que, para evitar confusiones con la Iberia matriz, acabase imponiéndose
el nombre de Georgia hoy
vigente...
En el Oriente
Próximo se produce un fenómeno similar al que observamos en Europa: pueblos que comparten
filiación común –cantábrica,
como ahora se reconoce al fin-, sustentan también unas mismas creencias
religiosas (los pueblos del Libro), circunscritas en este caso en el marco
del cristianismo... Y en el Oriente Cercano, también, al
repartirse entre dos religiones que, en su origen, fueran la misma: islamismo y judaismo.
Resulta sencillo presumir la evidente relación
existente entre los Iberos
asiáticos y los Hebreos del
extremo occidental de este mismo continente. Y dadas las totales afinidades
raciales de éstos con sus hermanos y hoy adversarios los pueblos de estirpe
árabe, se hace imposible no
concluir que todos estos pueblos se encuentran estrechamente vinculados
entre sí. Como por otra parte denuncia el hecho de que Arabes y Judíos se
expresen en dos lenguas hermanas
de cuño semita... ¿Son los pueblos semitas –y, por ende, sus
hermanos del Asia Anterior-
originarios como todos los Europeos
e Indoeuropeos del Norte de España?... existen razones
de peso para tomar esta posibilidad seriamente en consideración...
El propio gentilicio de los Hebreos está estrechamente relacionado con la antigua grafía
del nombre del río Hebrón o Ebro... Los significados de hebreo = eberim = ibraim en las lenguas del Mediterráneo oriental fuera:
occidental, del final de la Tierra, del País del Ocaso... o del Hebro... Históricamente se haya
postulado a Armenia como cuna
del pueblo judío, confirmando
con ello su ascendencia ibérica
al ser Armenia Mayor uno de los
antiguos nombres, documentado
cartográficamente, de la Península
Ibérica (y del propio río Ebro,
como prueba la toponimia de sus fuentes)...
La ascendencia de los Arabes no parece ser muy distinta... el objetivo declarado del
pueblo árabe en su conquista del
Norte de Africa fuese la Península Ibérica; tierra a la que
–conscientes de su ascendencia ibérica-
conocían con el nombre de Al Andalus
(El Paraíso). Lo que explica que
los pueblos de raza bereber se
sumasen encantados a esa labor de reconquista
del solar ibérico del que también ellos se sabían originarios. Y en este
caso contamos con el testimonio de Salustio
al documentar que todos los pueblos
de raza blanca del Norte de Africa eran originarios de la Península Ibérica.
¿No cae por su propio peso que si la raza bereber procedía de Iberia,
sucediera otro tanto con los pueblos del Mediterráneo oriental que tan innegables vínculos tienen con
sus vecinos norteafricanos?...
La guerra del castellano (VII) La actitud
inconcebible de Castilla... y de Cantabria (Diario Alerta - 16-02-2003)
A veces tengo la impresión de que estoy soñando
y hasta, a la vista de cómo se conducen Valladolid
y la propia Junta de Castilla y León en el asungto de la cuna
y del Camino de la Lengua, me ha asaltado la duda respecto a si
mi ciudad natal y el gobierno de esa región aspiran a integrarse
próximamente en la comunidad de La Rioja. Porque de otro modo,
no alcanzo a entender cómo se alían con la región española que más daño está
tratando de hacer a la región castellanoleonesa, al robarle
nada menos que el orgullo y la gloria de haber servido de cuna de la lengua
Castellana....
Y entretando, mientras los munícipes de las
capitales castellanoleonesas se despepitan por verse incorporados al
proyecto riojano, todas las comarcas septentrionales de
Castilla y León en las que en realidad naciera nuestra lengua, languidecen
en el más absoluto de los olvidos, me imagino que perplejas al contemplar
cómo hasta sus propios paisanos les dan la espalda para unirse a quien, en
puridad, se está conduciendo como su enemigo... Si esto se hubiera
planteado en la Edad Media habría
sido el desencadenante de una guerra...
Es estúpido que se consagre como dogma que la
lengua castellana nació en una provincia que jamás ha formado
parte, propiamente, de Castilla... el problema que
subyace detrás de todo este asunto es el de la pavorosa insolidaridad
de las gentes de nuestro país, unido al de su no menos pavorosa ignorancia...
Algún día les contaré a ustedes con todo detalle
cuanto ha acontecido desde que el día 9 de Octubre del pasado año
presentase yo mi impugnación a la propuesta presentada por La
Rioja para que su Camino de
la Lengua fuese declarado Patrimonio de la Humanidad.
Algún día se lo contaré –y se lo contaré también, de paso, a la Presidencia
de la UNESCO, a la del Consejo de Europa... y a alguien
más que de momento me callo, para que se conozcan todas las maniobras
arteras y bajas que mis antagonistas riojanos (y sus acólitos castellanos) han urdido para tratar de hundir mi
propuesta de un nuevo itinerario que se muestre fiel y riguroso con la
verdad histórica...
Depurando responsabilidades (I) ‘A cada ruin, le
llega su San Martín’ (Diario Alerta - 09-02-2003)
Ahora que los estudios genéticos han confirmado cuanto yo había descubierto a través de la investigación filológica,
historiográfica, mitológica, etnológica, antropológica y arqueológica,
ahora que es ya unánime entre los genetistas la convicción de que la Europa paleolítica –y, por ende, el
homo sapiens- nacieron a orillas del Cantábrico, ahora que toda una
legión de investigadores europeos y norteamericanos refrendan este capítulo
fundamental de mis ya viejas tesis históricas, denostadas y perseguidas durante dos décadas por la Universidad
española y por la totalidad de los políticos e intelectuales de nuestro
país, parece llegado el momento de que yo haga con cuantos me han ninguneado durante veinte años, lo que
ellos habrían hecho conmigo si la Ciencia
les hubiera dado la razón y su veredicto hubiera sido contrario a mis
tesis: decapitarme...
Mi calvario
comenzó al haber incurrido en el nefando
crimen de descubrir que nuestra
especie había nacido a orillas del Cantábrico. Horroroso crimen,
ciertamente, porque yo había dado con algo que nadie había ni siquiera olido jamás y que, por consiguiente, ponía
en evidencia la ignorancia –y lo que es peor- el bajísimo nivel intelectual
de todo el mundo intelectual y académico
de nuestro país. Esa es la cruda y triste realidad: se ha hundido mi vida durante veinte
años, no porque mis tesis fueran erróneas sino justamente por lo contrario:
porque eran ciertas; se ha hundido mi vida porque había visto lo que nadie
había sido capaz de ver; se ha hundido mi vida porque, al descubrir algo de
la magnitud de lo que he descubierto, los niveles de celos de la por
definición y por antomasia enviodiosísima clase intelectual española,
alcanzaron cotas imposibles de medir y de superar.
Por este terrorífico crimen –por poner en
evidencia la horrorosa mediocridad de nuestros intelectuales y políticos-
se ha arruinado mi vida en su etapa de mayor creatividad y madurez, y por
eso, porque ya está uno
absolutamente harto de ver cómo los Españoles nos erigimos en jueces y en
verdugos de nuestros mejores compatriotras..., porque ya está uno aburrido
de soportar a inquisidorcillos de mala muerte que lanzan anatemas a diestro
y siniestro, amparados en su condición de clérigos, de catedráticos, de científicos o de políticos...,
porque ya ha pasado, venturosamente, el tiempo en el que la verdad no la
dictaba la Ciencia sino los santones
de turno..., por todo ello, no voy a parar hasta conseguir que la sociedad
vea a quienes así se han conducido conmigo, como lo que verdaderamente son:
gentes vacías, ignorantes, mediocres, fatuas, prepotentes... y, además,
malas personas...
El denominador común de todos esos personajes es el de ser unos
vividores de tomo y lomo, pendientes sólo del saldo de su cuenta corriente,
de acumular prebendas y distinciones y de mantener lo más alta posible la
cotización de sus nombres, disfranzándose para ello, si es necesario, de ecologistas, de solidarios, de feministas,
de ultrademócratas o de lo que
sea. Cuando la triste realidad es que todo aquello que no les beneficie, de
manera directa o indirecta, se les da una higa...
El primero en el que en esta nueva etapa voy a
centrar toda mi artillería, es un
individuo del que sólo conozco su apellido, Muñiz, y que ostenta,
según me dicen, el cargo de Director General de Patrimonio Cultural de
la Comunidad de Cantabria... ¿Por qué?... pues porque hace cosa de unos
meses, se produjo esta escena que brevemente les comento: en una reunión de
responsables de Patrimonio de
las comunidades que poseen obras gestadas por el arquitecto catalán Antoni Gaudí, la representante de
la Generalitat de Catalunya le
hizo algún comentario, en tono elogioso, a ese tal Muñiz en relación conmigo y con esta página de ALERTA. Y de este auténtico donnadie, demostrando su nula
categoría intelectual y humana, fue y le espetó a aquella señora lo que
sigue: ¡Ah! ¿pero ese señor no es un
loco?
La arquitecta catalana, que conoce mi vida y mi
obra porque he sido, en Cataluña y en toda España, el pionero en la lucha por la recuperación de nuestro Patrimonio
Histórico-Artístico, le contestó a este botarate que ella ignoraba si
yo estaba loco o no, pero que había ido por delante en todo cuanto he
emprendido y que en todo ello el
tiempo me ha dado la razón. Por desgracia, España está inundada de Muñices. De personajillos que no han
hecho ni harán en toda su vida nada singular ni destacable y que, en su
infinita estupidez, se permiten el lujo de ningunear a quien les da algo
así como un millón de vueltas en todo...
La cuna cantábrica de Europa (I) Las lenguas
‘euroasiáticas’ (Diario Alerta - 02-02-2003)
La revista Investigación
y Ciencia, edición española de Scientific
American, en su número correspondiente al mes de Enero, ha reproducido
el artículo... en el que se da
cuenta de los estudios genéticos y filológicos que establecen que Europa
tuvo su cuna en el Norte de España, habiéndose proyectado inicialmente por
ambas vertientes de los Pirineos. Varias regiones españolas se ven,
pues, directísimamente implicadas en esta revolucionaria tesis que supone
la rotunda confirmación de las que, en este sentido, vengo defendiendo
desde el año 1984...
Asturias,
Cantabria, Euskadi, el norte de Castilla y León y de Navarra, prolongándose
por el Oeste hasta Galicia e incluyendo por el Este e Aragón y a Cataluña –junto con todas
las regiones del Sur de Francia- se convierten, así, en la matriz de Europa y de cuantos
pueblan este continente. Aunque, ¿solamente de ellos?...
Si como ahora se reconoce científicamente, los Europeos
son originarios del Norte de España
y si, como también se admite, la lengua vasca o baskongada
es la más antigua del continente, matriz por consiguiente de todas las lenguas europeas, entonces ello
viene a significar que no son sólo los Europeos
los que tienen su cuna a orillas del
Cantábrico sino también buena parte de los pueblos asiáticos que se expresan en lenguas integradas en la gran
familia de las lenguas indoeuropeas...
La
proyección de las lenguas indoeuropeas no se produjo de Este a Oeste como
hasta hoy se ha venido sosteniendo, sino que sucedió exactamente a la
inversa. Fue, pues, el extremo más occidental de Europa el que acuñó la
primera lengua hablada en el continente euroasiático, habiendo dado vida
por ende a los primeros pobladdores del mismo. Gentes que, como ahora
confirman los estudios genéticos, se proyectaron por toda Europa y el Norte
de Africa desde su solar originario a orillas del Cantábrico y de ambas
vertientes –francesa y española- del macizo de los Pirineos. Todo lo cual acontecía en el decurso del
último período glaciar y, por lo tanto, en pleno Paleolítico Superior... Altamira,
Lascaux...
La guerra del Castellano (VI) Hablaban romance, pero
escribían en latín (Diario Alerta - 26-01-2003)
Uno de los estudiosos que ha arremetido contra
la aberración emilianense ha sido
el divulgador Nicolás Dulanto Sarralde, castellano viejo de apellidos netamente
euskéricos al que debemos el libro Valpuesta, la cuna del castellano
escrito, editado con el loable propósito de denunciar la
inconsistencia de la pretendida filiación riojana de la lengua castellana...
Dulanto nos ha dejado escrito en su libro lo que
sigue: Los escribas, formados
escriturísticamente en latín, al redactar aquellos códices no mostraban con
fidelidad, ni podían hacerlo, la lengua que usaban ellos y sus paisanos.
Esos documentos no nos ofrecen el proceso del romance castellano, sino adaptaciones
escritas. Sin embargo, las gentes y los escribas hablaban romance y se entendían perfectamente entre sí, tanto como
hoy lo hacemos nosotros en español. La denominación de un castellano incipiente o “balbuciente” como se
ha calificado con frecuencia al de las glosas, hay que atribuirlo al
romance escrito, no al hablado. Del Castellano oral al escrito hay un gran
trecho, no sólo de años, sino de varios siglos.
La mayoría de la población era ágrafa, puesto
que era analfabeta. Se comunicaba mediante el uso de la lengua romance y no
del latín. Sólo algunos clérigos y gente de curia estaban alfabetizados y,
a la hora de escribir, empleaban el sistema gráfico latino en unos textos
que después tan sólo podían leer personas instruidas. Uno de los cánones
del Concilio de Tours, celebrado en 813,
nos muestra la barrera idiomática existente entre la gente del pueblo con
el romance como vehículo de comunicación hablada y el reducido ambiente de
los cultos. Su normativa, que recomienda a los presbíteros que “prediquen en romance para que puedan ser entendidos
por los fieles”, nos revela de forma indirecta que la lengua usada
por la generalidad de la gente no respondía (ya) a la latina, que era la
que los instruidos usaban en la escritura. (el ya no es del autor, sino mío)...
Resulta sencillamente aberrante pretender que en
el decurso de los siglos IV, V, VI o VII el conjunto de la sociedad pudiera haber utilizado como
único medio de expresión la lengua latina... y que un siglo más tarde nadie
tuviera ya ni idea de dicha lengua. Si el latín hubiera llegado a ser lengua
materna en alguno de los países europeos, habría evolucionado y se
habría modernizado en mayor o
menor medida, pero no habría dejado de hablarse jamás para dar paso a
otras lenguas, hermanas, pero sustancialmente distintas...
En definitiva muestren la modestia
intelectual necesaria como para admitir que todo lo que se creía saber
sobre la génesis de la lengua castellana es absolutamente falso.
La guerra del Castellano (V) Un itinerario
cultural sin parangón (Diario Alerta - 19-01-2003)
Tanto por su trascendencia histórica como por su
riqueza artística, la Ruta del
Castellano que he sometido a la consideración de la UNESCO y de la Corona Española, configuraría el más completo de todos los
itinerarios culturales hoy existentes, al aunar los alicientes y
atractivos de carácter histórico, con los artísticos y los paisajísticos...
La lengua –el castellano- se convierte en el pretexto para poder recorrer
una larga nómina de jalones o hitos de nuestro pasado... lengua que es
fruto del hermanamiento de varias lenguas de estirpe cantábrica, habladas
hasta hoy mismo en el Norte de España. Y me estoy
refiriendo al Lleunés y su hermano gemelo el Bable asturiano... Al
Montañés
y a su versión meseteña el Palentino... A la lengua Euskera
o Baska... Y, por último, a la lengua Kaló o Gitana,
hablada por los Gitanos
españoles...
En la Ruta
del Castellano que propugno se hallan presentes, para empezar, seis
Ciudades Patrimonio de la Humanidad: Salamanca, Zamora, Ávila, Segovia,
Alcalá de Henares y Toledo. Las seis apiñadas en torno a los
antiguos Montes Herminios, conocidos en otras épocas como Macizo de Zarrata o Sarrat: la actual Cordillera
Central o Carpeto-Betónica que viene a ejercer
la función de bisagra entre las dos Mesetas
castellanas.
Algo más al norte y en el área de influencia...
de la Cordillera y la Subcordillera Cantábricas... otros cuatro
hitos fundamentales de la nueva Ruta
que propongo... las siguientes capitales: Burgos, León, Oviedo y
Palencia... que incluyen cuatro de las Catedrales más notables de
Europa, Patrimonio de la Humanidad, también algunas de ellas. Y
estamos hablando de la Cabeza de Castilla, en el caso
de Burgos; de la antigua capital del Reino de León; de la
sede, a su vez, del Principado de Asturias y, por
último y en el caso de Palencia, de la primera
Universidad española amén de una de las primeras del continente
europeo, en competencia con las de Bolonia,
Oxford = Oxonia y Cambridge = Cantabrigia...
Añadir un abanico de centros monásticos y
elesiásticos de primer orden. Encabezan la lista las Catedrales de El Burgo de
Osma, Vitoria y Santo Domingo de la Calzada. Se suman en ella las Colegiatas
de Santa María de Toro, Santa María de Santillana, Santo Domingo de Soria y
Santa María de Aranda... Monasterios tan renombrados como
los de: Santo Domingo de Silos, San Salvador de Oña, San Pedro de Arlanza,
San Pedro de Cardeña, Sahagún, Santa María de Valpuesta, Santa Clara de
Tordesillas, Santo Toribio de Liébana, Santa María de Aguilar de Campoo,
Santa María de Nájera, San Millán de la Cogolla, Santa María de Puerto,
en Santoña, Valbuena de Duero o San Juan de Duero, en Soria...
más los monasterios integrados en la Ruta
del Castellano, algunos de
ellos tan destacados como Las Huelgas y la Cartuja
de Miraflores, en Burgos, San Benito de Valladolid, San
Marcos de León y Santa María del Naranco y San
Miguel de Lillo, en Oviedo.
La lengua española se ha gestado en todas esas
regiones españolas que han quedado contempladas en los párrafos
precedentes... regiones en las que existieron otras joyas artísticas, de
rango incluso superior, como las que hoy podemos contemplar en un
puñado de grutas desparramadas por el entorno inmediato de la nueva
ruta Ruta del Castellano y entre
las que destacan yacimientos arqueológicos universalmente renombrados como
los de Altamira y Puente Viesgo, en Cantabria... o
Atapuerca
en Burgos.
Insisto, una vez más, en que ningún país podría
reunir en una sola ruta turístico-cultural, por otra parte no excesivamente
extensa, enclaves tan señeros y variados como los mencionados, siendo
plausible pensar que su trazado llegará a ser recorrido por gentes de todo
el mundo, con independencia de que tengan o no como materna a la lengua
castellana... una Ruta
integradora... de la que sería posible obtener de la UNESCO, esta vez sí, la declaración
de Patrimonio de la Humanidad...
La guerra del Castellano (IV) Se llama
‘Castellano’ porque nació en Castilla (Diario Alerta - 12-01-2003)
La lengua
castellana no nació en La Rioja y existen centenares de documentos y miles
de argumentos filológicos que lo demuestran... intenten acallarme de la única forma posible: con la fuerza de la razón científica.
El trazado inicial de Ruta no
tiene ningún futuro, porque ha sido gestado a espaldas de la verdad
científica...
El proceso de evolución seguido por los
diferentes sonidos –las consonantes-
me permite saber qué palabras son más antiguas que otras y qué lenguas son
más antiguas que otras. Porque el quid
de la cuestión radica en que se ha pensado que cuando se escribieron las Glosas estaban naciendo las lenguas
romances, lo que es un disparate colosal. Hacía muchos siglos que la gente
hablaba en romance y que los monjes, sólo los monjes, escribían, que no hablaban, en latín... en
textos –de los albores del siglo VII-
aparecen palabras y sintaxis en castellano...
Son dos debates distintos en los que, si lo
desean, van a poder encontrarme: 1)
el de la Cuna y Ruta del Castellano,
que zanjan por sí mismas las escrituras de los siglos VII, VIII, IX y X; 2) el del verdadero origen del Castellano y de todas las lenguas romances, que he propuesto sea debatido, ampliamente en un Congreso sobre los orígenes de la
Lengua Castellana que debería celebrarse a mi juicio, en la ciudad de Burgos...
La Ruta
del Castellano no puede ignorar, bajo ningún concepto, ni a Burgos, ni a León, ni a Asturias,
ni a Cantabria, ni a Alaba. Porque si se prescinde de
estas provincias, será todo menos Ruta
del Castellano... buscando una salida razonable en mi trazado de la Ruta incluyo San Millán, sino también a Nájera
y a Santo Domingo de la Calzada.
Dos ciudades riojanas que no
pueden quedar fuera del Camino de
nuestra lengua... En todo caso, huir de localismos y evitando, en lo
sucesivo, incurrir en la tentación de señalar una cuna concreta para
nuestra lengua. Porque esa supuesta cuna, no existe, y si hubiera que
señalar una se situaría a orillas del Cantábrico. Más específicamente, en
las costas de Cantabria, región
que –a pesar de ello- no ha movido
un solo dedo para reivindicar su derecho a ser reconocida madre de nuestra
lengua...
La guerra del Castellano (III) El mayor
descubrimiento de la Historia (Diario Alerta - 05-01-2003)
El pilar fundamental de cualquier proyecto
radica en la credibilidad y autoridad de la persona que lo ha concebido. Y,
en este sentido, quienes actuando a la desesperada intentan boicotear mi
proyecto de un nuevo trazado para la Ruta
del Castellano, desconocen que acaba de publicarse en sendas revistas
científicas, una francesa y otra estaunidense, el resultado de unas
investigaciones genéticas y filológicas llevadas a cabo por científicos
europeos, que suponen la
confirmación aplastante de las tesis que vengo defendiendo... en relación
con la filiación cantábrica de todos los habitantes de Europa...
El haber defendido los orígenes del lenguaje y
de la civilización en el Norte de España, nada menos que veinte años antes de que se
confirmen a través de la Genética, considero que es mi principal credencial
a la hora de rebatir cuanto se ha venido diciendo respecto a los orígenes
de nuestra lengua y de proponer una alternativa como la que he presentado a
la UNESCO... Ha querido el azar
que la publicación de ese descubrimiento se produzca un mes después de que
yo presentase a la UNESCO, como
base de mi propuesta, el libro titulado: La región Cantábrico-Pirenaica, cuna del lenguaje humano...
He debido sufrir casi veinte años de ostracismo
por defender la tesis del origen cantábrico de toda la población del
continente europeo, probada ahora a través de los estudios de Biología
Molecular. Este descubrimiento crucial... acaba de publicarse en la revista
Pour la Science, edición
francesa de la estadounidense Scientific
American... del mismo se desprende que la mayoría de los pobladores del
continente europeo proceden del Norte
de España. Más concretamente del País
Basko, aunque no debe
concederse mayor importancia a este dato, dado el total desconocimiento que
los investigadores de todo el mundo tienen respecto a la extensión de la
antigua Baskonia = Bizkaya =
Kantabria = Asturia que se extendía desde el Hebro hasta el Cantábrico
y desde el Hebro hasta el Cantábrico
y desde los Picos de Europa
hasta el Pirineo...
También desconocen que fueron los colonizadores
de buena parte de Asia... Y de América... Y en cuanto a Africa, tanto Salustio como los
propios Cartagineses dejaron
escrito que los habitantes de todos los países que se extienden al Norte de
ese continente, eran originarios de la Península
Hibérica. Por eso son de raza blanca,
en contraste con todos sus demás pobladores de raza negra...
La noticias de la filiación hibérica de los
habitantes de Europa ha pasado totalmente inadvertida en España,
deliberadamente silenciada por la práctica totalidad de los medios de
comunicación tanto audiovisuales como escritos. Y ello a pesar de que, a mi
juicio, desde el descubrimiento de América
por la Corona de Castilla en 1492, no se había producido una
noticia de mayor trascendencia en todo el mundo... la propia filiación hibérica
de la civilización humana...
Hace dos décadas que vengo defendiendo que la solución, a largo
plazo, para el conflicto basko que desde la restauración de la democracia
viene enturbiando el desarrollo en armonía de la convivencia entre los
Españoles, pasa por la difusión a gran escala de los resultados de
investigaciones como las mías o como ésta que acaba de publicarse en
Francia y en los Estados Unidos. Porque estos estudios prueban que los
Baskos comparten el mismo origen que el resto de los Españoles, confirmando
que los vínculos de fraternidad entre el pueblo Euskaldún, el Nabarro, el
Asturiano, el Cántabro, el Gallego y el Castellanoleonés, son absolutos...trabajos
están centrados en niveles del Magdaleniense Inferior, definidos por el
catedrático como “una época contemporánea de importantes ocupaciones en
las cuevas de Altamira, El Castillo y el Juyo, cuyos materiales guardan
una gran similitud con los encontrados en la Cueva del Mirón”. Continúa...
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